La carne argentina copa España
Bistec es un emprendimiento familiar que combina una boutique de carnes con un restaurante, donde la carne argentina es protagonista.
"Somos una marca especializada en la importación y distribución de carne argentina - todo Cuota Hilton- con calidad que controlamos nosotros mismos en origen, y la distribuimos a través de nuestras boutiques de carnes, en Madrid y en Valencia", señala Carlos Martín Schwartzmann, argentino radicado en España. Procedente de una familia tradicionalmente ligada a la exportación de carne argentina, y con mucho conocimiento del mercado español, la familia le dio forma a un proyecto pensado por muchos años.
Y así nació Bistec hace ocho años, con un modelo de negocios innovador que tiene a la carne argentina como protagonista: por un lado una boutique de carnes con una coqueta oferta de cortes envasados al vacío, y por otro lado, un restaurant donde se preparan distintos platos -desde empanadas hasta bife de chorizo- maridados con vinos, por supuesto, también argentinos.
"La idea nació por la suma de pasión y necesidad. Nosotros siempre estuvimos vinculados al negocio de la carne, y como argentinos afincados en Madrid sentíamos esa necesidad de los consumidores de encontrar buena carne argentina. Veíamos que sólo se encontraban cortes del "tipo argentino"", cuenta Carlos, "Al principio teníamos incertidumbre porque no sabíamos cómo nos iba a ir. España tiene buena carne y una cultura cárnica muy presente, y muy marcada en cada región del país, y a su vez muy diferente a la argentina. Apostamos por ese modelo de negocio que es boutique de carnes, donde trabajamos carnicería sin cuchillo y ofrecemos a nuestros clientes una góndola expositora con todos los cortes envasados al vacío en bifes o en pieza entera, lo que acá no solía verse mucho y contribuyó a que llame la atención".
Control de calidad desde el origen
El compromiso con la calidad comienza en Argentina, donde se selecciona y supervisa directamente cada corte de carne. A través de frigoríficos de renombre, Bistec cuenta con veterinarios propios que garantizan el control en origen. Este cuidado minucioso asegura que el cliente español reciba un producto uniforme y listo para cocinar.
"Nuestro bife de chorizo llega sin cordón, y el solomillo sin cadenita, de modo que ya están listos para consumir. De esta manera, el cliente sabe que la calidad será siempre la misma", explica Schwartzmann.
"El ojo de bife, conocido acá como entrecot, es uno de los cortes más demandados, al igual que la medialuna de vacío. También ofrecemos algunos cortes españoles porque sabemos que el cliente local aprecia mucho la carne con hueso. Pero nuestro argumento siempre es el mismo: la carne argentina tiene características únicas gracias a su alimentación, clima y crianza. El sabor se destaca por sí solo", afirma.
Bar de carnes: el negocio integrado
El proyecto no se limita a la distribución de carne. La apertura de un restaurante completó la experiencia, permitiendo a los clientes degustar los cortes argentinos y conocer los sabores en primera persona. La combinación de ambos locales le ha dado una sinergia única al negocio.
Con clientes de diversas nacionalidades y niveles socioeconómicos, la marca ya se posicionó como una opción premium accesible. Desde jóvenes que compran cortes esporádicamente hasta familias que organizan asados semanales, la carne argentina entra a los hogares de los vecinos y no tan vecinos, ya que algunos optan por la compra on line.
"No es un canal que mueva mucho volumen, porque el consumidor no se anima mucho a comprar el producto fresco por internet en España. Muchas de las ventas que tenemos online es de gente que ha venido a la tienda y que ya sabe lo que va a recibir", agrega Schwartzmann y adelanta: "Estamos por abrir Majadahonda, un municipio de poder adquisitivo medio alto, donde plantearemos la tienda y el restaurante juntas en el mismo local. Es una apuesta fuerte que tenemos muchas ganas de estrenar. Pasito a pasito nos vamos ampliando".